COMUNIDAD GUÌA NRO 1 SAN ANTONIO DE PADUA: 02.08

“Hoy es el día del pensamiento, en este día la guía piensa en todas sus hermanas guías desparramadas por el mundo. Piensa como están, que necesitan, y también reza por ellas.
Pero, no podemos pensar en las guías de todo el mundo si todavía no reparamos en la que tenemos al lado.

Por eso, yo les propongo que nos tomemos un minutito y pensemos en la guía de nuestra comunidad, en la de nuestro rama, en la de nuesrta seizena, patrulla, equipo o rueda. ¿Necesita algo?, ¿que la escuche, que le regale una sonrisa, que le de un consejo, que juegue con ella, que la perdone por algo que hizo?

“La guía considera a todos como hermanos”. Y la comunidad es una familia en dónde cada una, cada rama tiene su rol. Las alitas son las hermanitas mas chiquitas, a las que todos mimamos, cuidamos, las que en los campamentos se sirven primera la comida y las que siempre tienen una sonrisa inocente y desinteresada para regalarte. Las caravanas, ya son guías, pero son las guías mas chiquitas, son las primeras en cantar, en animar una caminata, en investigar, son tal vez, las mas curiosas, las que mas hablan. Ya en la rama del sol, están las hermanas adolescentes, que, por ahí son mas calladas, pero que están siempre para ayudarte, las guías que son grandes para muchas cosas, pero chicas para otras. Después siguen las guías mayores, que como la palabra lo dice son las mayores, las que tienen que dar el ejemplo y proteger a las demás, las que tienen que ir en último lugar, las que tienen siempre las dos manos libres cuando se trata de servir, las que ya se están preparando, para en un futuro, ser guías de sus hermanas. Y por último, pero no menos importantes, las guiadoras. Las guiadoras, dentro de esta gran familia, pueden ser muchas cosas. Para las alitas serán como las tías, para las caravanas tal vez, como primas, y para las solares y guías mayores ya son hermanas, amigas. Las guiadoras, son la imagen responsable, protectora, y ellas son las que realmente se ponen en último lugar, las que dejan de dormir, de comer con tal de que sus guías lo hagan.

Y así debemos sentirnos, cada vez que venimos al grupo, partes de una familia, en la que siempre vamos a tener una oreja que nos escuche, una mano que nos ayude, labios que nos regalen una sonrisa, una voz que nos de un consejo, sin importar el color de su pañuelo. En este, el día del pensamiento, yo me levanté pensando en todas ud., mis hermanas.... y ustedes?

feliz día del pensamiento hermanas...